En cabina con Mario Filio, locutor, cantante, actor de doblaje, comediante, conductor de programas de radio y televisión, productor comercial y radiofónico, con más de 35 años de experiencia. Miembro de la Asociación Nacional de Actores, miembro de la Asociación Mexicana de Locutores Comerciales, así como de la Unión SAG-AFTRA en los Estados Unidos de América (TW: @mariofilio // mfilio.com // FB: Mario Filio // Youtube: mfilio // IG: @mariofilio).
Hablar en público es el miedo número 1 en el mundo, por encima del miedo a la muerte.
60% de las personas han sido rechazadas de un trabajo por su poca habilidad para hablar frente a grupos. Este miedo se conoce como glossophobia.
3 de 4 personas sufren ansiedad al hablar en público. Más mujeres que hombres, pero los hombres son más propensos a pedir ayuda.
El 5% de la población mundial ha experimentado algún episodio de glossophobia.
Escúchate primero.
Grábate y escúchate, acepta tu voz tal cual es para despues poder utilizarla y controlarla mejor.
Ser empático.
Trata de imaginar cómo se siente tu interlocutor o audiencia.
Define qué emociones deseas provocar en los demás.
La respuesta de tu audiencia dependerá de la emoción qué utilices al hablar.
Respira.
Respira profundamente por la nariz en dos tiempos sacando el abdomen en la primera inhalación y llenando el pecho en la segunda inhalación .
Suelta el aire suavemente por la boca. Repítelo de 3 a 5 veces o hasta que te relajes.
Relaja los músculos de cuello y hombros.
Haz giros con tus hombros hacia adelante y hacia atrás. Mueve tu cabeza con suavidad hacia abajo hasta tocar tu pecho con la barbilla, hacia atrás y a cada lado.
Colocación.
Cambia la colocación usando los diferentes resonadores de tu cuerpo. Los tonos graves vibran en el pecho, los tonos medios en la boca y los agudos en tu nariz y en la parte alta de tu cabeza.
Articula.
Mueve lengua, labios y mandíbula al hablar para ganar claridad.
Haz erres con lengua contra el paladar, trompetillas con labios cerrados y mueve la boca y la mandíbula practicando frases sílaba por sílaba lentamente y acelera la velocidad poco a poco.
Ritmo y Tono.
Variar el ritmo y el tono te ayudará romper la monotonía y dar la emoción necesaria a las palabras.
Repite una frase rápido y en tono agudo, luego lento y tono grave. Después lento en tono agudo y rápido con tono grave.
Manejo de intenciones.
Utilizar los centros de energía para imprimir la emoción deseada:
Centro Intelectual – Asertividad
Centro sentimental – Ternura
Centro visceral – Enojo
Centro sexual.- Placer
Vuelve a grabarte para comparar tu avance.
vía: MARTHA DEBAYLE EN W